Calma para ti – calma para tu bebé

La solución consiste no solamente de una relajación de nuestro cuerpo estresado, sino de una intervención suave y de apoyo emocional que aumenta la comprensión entre padres e hijos. Es un enfoque que va mucho más allá que una relajación, aúnque todo comience con un gran respiro profundo.

Nos acercamos a los asuntos de cada familia y cada pareja madre-hijo o cuidador principal-niño de forma individual. Escuchamos, observamos y nos abrimos a las sensaciones que percibimos. Todo aquello que es necesario para luego dar un apoyo a las capacidades de autorregulación emocional que cada persona lleva dentro de si mismo.

En realidad estamos hablando de un tema muy complejo que tiene su origen en nuestra propia reacción a las dificultades. Cuando nos convertimos en padres, de repente nos vemos enfrentados con nuestros propios obstaculos, que están intrínsecamente arraigados dentro de nosotros desde hace muchos años. Esas reacciones automáticas interfieren con nuestra capacidad de establecer el vínculo con nuestro bebé y crea una sensación de distancia. Quizás no somos capaces de  percibir esa distancia, pero el niño sí tiene esa capacidad. Lo que para nosotros no es perceptible se puede describir como una tensión muscular que con los años se vuelve inconsciente. Solo sentimos a esa zona tensa cuando de repente nos molesta un dolor. Así nos podemos imaginar a nuestro sistema nervioso que está en tensión constantemente. Nuestros hijos tienen una enorme sensibilidad y perciben aquellas pequeñas tensiones y reaccionan acerca.

Lo que queremos conseguir en el Ambulatorio Emocional principalmente es, que la madre/los padres vuelvan a sentirse relajados con si mismos, apoyados emocionalmente y que puedan tomar un respiro de su estrés. Normalmente después es cuando viene un «dejar ir» más profundo de las emociones retenidas que beneficia el proceso de calmar y equilibrar el sistema nervioso. Solo cuando hemos dejado el debido espacio y hemos acompañado a los padres por esa primera fase con atención y cariño comenzaremos el trabajo de hacer consciente la reacción al estrés y los obstáculos interiores.

Los padres aprenden a llevar la situación sintiendo cada vez menos estrés. Stress Response Ability es un sistema de 6 pasos en el que se utilizan técnicas psico-corporales para reducir la reacción del estrés. Paso a paso los padres aprenden a cambiar su sensación durante una situación determinada.

Eso tiene una consecuencia inmediata en el bebé. Por un lado puede ahora calmarse y sentirse más seguro y por otro lado le deja ahora espacio para expresar lo que tanto le molestaba, sea una memoria dolorosa del parto o la falta de la seguridad postnatal.

A partir de esa primera intervención saldrán aspectos emocionales más profundos a la superficie que pueden así trabajarse uno tras otro en las consecutivas sesiones.

Así que no estamos hablando de una intervención tipo “qué hacer para mantener la calma”. Se trata de restablecer las bases de seguridad neurofisiológicas del sistema nervioso que permiten crear una relación de confianza, profundizar el vínculo y así mejorar la comunicación entre padres y niño.

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